Los terroristas son tontos

Los terroristas son tontos.

La gente los llama asesinos, pero los terroristas son tontos. Y además unos antiguos. Totalmente casposos, vamos.

Joder, se supone que estamos en el siglo XXI.

Se supone que la lucha armada tuvo algún sentido en el pasado.
Pero joder, estamos en el siglo XXI. Matar a un tío con una pistola es fácil, poner una bomba es fácil. Cualquiera puede hacerlo. Hasta un mono si le enseñas puede hacerlo. La mona Chita hacía cosas más difíciles.

Poner una bomba o pegar un tiro a alguien es una acción para la que no hay que estudiar, ni prepararse. Joder, yo a los 7 años ya disparaba balas del calibre 22 con el rifle de mi padre. Y acertaba siempre en el blanco. Y no presumo de ello porque está chupado, porque eso lo aprende a hacer cualquier imbécil; el tonto del pueblo lo puede aprender.

Las organizaciones terroristas se han quedado desfasadas. No tienen ni puta idea de tecnología, ni de qué va todo este asunto que llamamos civilización.

Las organizaciones terroristas están completamente desfasadas. Como la monarquía, las religiones teístas, las grandes discográficas, la SGAE, los motores de combustión, las corridas de toros, los torneos medievales, el circo romano, los bisoñés, el orinal debajo de la cama.

Todo bien rancio, apestando a meado avinagrado.

Lo siento, pero es así.

Yo no creo que este blog lo esté leyendo ningún terrorista. No creo que lo lean más allá de 3 ó 4 personas. No creo que los terroristas sepan ni lo que es un blog, pero si por casualidad participas activamente dentro de una banda armada y estas leyendo esto; joder, no te enfades, sé un poco autocrítico, reflexiona un poco, joder; modernízate, hombre, aprende nuevas estrategias de mercado para dar a conocer lo que piensas al resto de la humanidad. Sé un poco inteligente, lee algún libro de vez en cuando, vete a ver alguna performance o a bailar o a cenar con los amigos. No olvides que ahora en verano es necesario beber al menos 2 litros de cerveza al día para estar hidratados. Ponte un perfil en Facebook, suscríbete a algún blog de productividad personal, cómprate un Mac y una guitarra, trata de llevar un diario personal apuntando todas las cosas que se te ocurren, rómpete la cabeza para ver cómo le podrías estafar unos cuantos millones a un banco, rómpete la cabeza para ver cómo puedes gastar bromas de mal gusto a los del club Bilderberg, rómpete la cabeza para poner en ridículo a tus políticos favoritos, rómpete la cabeza para sacar a la luz las cosas bochornosas, tristes, penosas, escalofriantes y asquerosamente sucias que realizan tus mandatarios favoritos, rómpete la cabeza para contarnos con sencillez y humor y de manera bien argumentada lo que deseas para ti y para los tuyos, rómpete la cabeza para ver cómo puedes hacer para dejar de ser un tonto del culo. Joder, estamos en el siglo XXI.